




La fortaleza de La Mota en Alcalá la Real
Esta colina estratégica albergó un auténtico pueblo andalusí, con una gran mezquita, ciudadela, zona residencial y un mercado. Los restos de esta ciudad han sido descubiertos en excavaciones arqueológicas y son una parte muy interesante de la visita al castillo de La Mota en Alcalá la Real.
En el siglo VIII los Banu, una tribu con orígenes en Yemen, instalaron aquí un puesto militar que se llamó Qal’at, nombre que los cristianos convirtieron en Alcalá. En 1341 Alfonso XI conquistó de forma definitiva la fortaleza y desde entonces, y hasta la conquista de Granada en 1492, fue la frontera entre territorio cristiano y musulmán. Se pueden ver muchas atalayas en la zona, y en días despejados también se ve el castillo arabe de Moclín en la distancia.
Los edificios restaurados meticulosamente hacen que la visita al castillo de La Mota merezca la pena. También se merece una visita de toda la zona de excavaciones de la antigua ciudad andalusí con su mezquita, mercado, etc…. La Iglesia Abacial de Alcalá la Real, con su ubicación central en la fortaleza, es especialmente interesante. Su incendio por los franceses en 1812 provocó su abandono y su uso como cementerio. Ahora toda la nave tiene un suelo de vidrio y se pueden ver por debajo las sepulturas.